Anexo



“Gala”


-¿Cuándo vos arrancaste como fue?

-Arranque sola, por decisión propia. Muy al ensayo y error. A arriesgarme con todos los peligros y cuestiones que a lo mejor estando organizada no te pasa. Porque hablando con una compañera, y te dice tal cosa no hagas. También con la cuestión de los cuidados y los límites, lo hablamos con las compañeras. “Che no hagamos esto, tengamos cuidado con esto”. Y eso lo respetamos a rajatabla. Osea, ninguna hace servicio sin preservativo y todas cobran de tanto para arriba; no cobrar menos para no autoexplotarnos, ni tampoco romper el mercado.

- Alguna chica que quiere arrancar hoy ¿sabe donde?

- Nosotras como organización (FUERTSA) no podemos dar información porque sería facilitación de la prostitución. Pero sí fomentamos que la compañera se acerque para lo que sea y que tenga contacto con otras trabajadoras sexuales, es decir nuestra resistencia es esa, intentamos romper con el aislamiento en el que siempre estuvimos. Sobre todo las trabajadoras sexuales del privado o puertas adentro, o que trabajan en ámbitos donde no se visibilizan.

La trabajadora de la calle siempre está en contacto con otra compañera y por el mismo territorio en que circula, o sea está organizada con otra, la de privado trabaja sola, y ahí es donde se rompió el tejido social dejándonos solas y de hecho todas las políticas están pensadas para que las trabajadoras sexuales trabajen solas, o en un privado que está regenteado por la policía. ¿Ahí qué vas a decir?

-¿Cuál es la diferencia entre puertas adentro y privado?

- Cuando hablo de “puertas adentro” me refiero a trabajadora sexual autónoma que alquila su lugar o trabaja en su vivienda. En cambio “los privados” están a cargo de una persona puede ser una trabajadora sexual o no. Eso depende de la precariedad en la que se desarrolla, existe de todo.

-¿Cómo fueron tus inicios, tenías referencia?

-Cuando empecé tenía 19 años. Me vine a Rosario a estudiar y publicité en los chats nocturnos, ofrecí mis servicios en algunas páginas. Al comienzo era medio un juego, cobrar por sexo, no me pensaba como trabajadora sexual. Con el correr del tiempo comencé a pensar en una forma más profesional, de decir bueno: tener otro teléfono, abrir un blog propio para publicitar, hacer spam, y bueno todos estos años me fue bastante bien. En el 2009 por ej se trabajaba muy bien, yo trabajaba en hoteles y a domicilio, había más privados (departamentos con varias chicas). Además estaba en auge alquilar con dos o tres amiga un dpto temporario, en ese momento se podía hacer. Te daba seguridad, en general eran arreglos muy accesibles para todas. Hoy es carísimo, no se puede .

-¿Trabajar sola tiene beneficios?

- Y sí, yo me siento mal y no voy a trabajar. Obviamente si estoy en una cooperativa, es distinto, tengo que compensar lo que no hice, para ayudar con los gastos. Me tomo una responsabilidad con mi compañera.

Además trabajé en relación de dependencia, es ahí donde se ve la precariedad del arreglo. Una de las chicas que era trabajadora sexual se encargaba de tener el departamento en condiciones, de las fotos y de hacer la publicaciones . Ella también laburaba, nos dividiamos por turnos. Después se quedaba con un porcentaje.

En realidad lo que me servía era la experiencia, porque era el ámbito en que mejor se cobraba.

-¿Qué pasó cuando cerraron las Rosas?

-Cuando cierran “Las Rosas” empieza a generarse el trabajo autónomo. Tenía compañeras que trabajaban en ese lugar y estaban bien. Después se quedaron sin nada, porque algunas guardaban sus ahorros ahí. Ahora pasaron a trabajar en sus casas, y eso trae inseguridad. Hay compañeras que las han violado y entrado a robar.

-¿Cómo está el mercado ahora?

-Ahora hay mucha eclosión de lo que es el laburo callejero por la crisis económica, es más, nosotras (puertas adentro) estamos evaluando salir a la calle de nuevo debido a eso y a que hay pocos clientes.Yo he trabajo en la calle, pero más como una experiencia. Igualmente no era mi modo porque necesitaba mantener anonimato. Pero por otro lado no queremos salir, para no sacarles el trabajo a las compañeras que lo hacen desde mucho tiempo en la calle.

Antes usaba dos teléfonos, cuando no quería laburar lo apagaba. Y después cuando lo prendia tenía 20 llamadas perdidas, de clientes potables.

-¿Cómo te organizas el trabajo actualmente?

-En este momento me manejo diferente, no hago convencional. Antes lo programaba distinto, como yo quería. Tenía un teléfono con doble chip, me armaba mi “speech” y lo que yo hacía y lo que no. Lo mio es todo experiencia, ensayo y error. Muchas cosas no las hubiera hecho.

-¿Cuánto se cobra en el trabajo sexual autónomo?

-Nos ponemos de acuerdo con las compañeras. Yo cobro un poquito más que el resto, pero 200 pesos más. En general las que estamos en departamento, vemos lo que cobra la otra. Hoy hay un descoloque de precios por la crisis, por la necesidad. Sabemos que hacemos un servicio muy especial y no vamos a bajar los precios. Por eso somos putas, porque queremos cobrar lo que se nos cante, es nuestra libertad. Tengo una tarifa de $1000 y con eso me sostengo y se que tengo menos clientes que el resto pero bueno es mi decisión, por menos no laburo.

-¿Por qué trabajas en el anonimato?

-Trato solo de visibilizarme en algunos lugares, más puntuales, lugares “friendly”. Más siendo militante. Sino estás expuesta al abolicionismo que te dicen “ustedes tienen un prostíbulo”.

-¿Tu entorno sabe que sos trabajos sexual?

-En mí caso mí familia no lo sabe. Hay chicas que se han acercado a la organización y han decidido empezar a trabajar. Nos han dicho que desde cero se lo blanquearon a sus padres.

--¿Qué pasa cuando hay hijos?

Hay compañeras que tienen hijos. Pero técnicamente no te lo pueden sacar por ser trabajadora sexual. Lo que sí tenés el dedo encima, es una causa para que el padre o quien sea objeto. La justicia es muy patriarcal y clasista. Por los derechos del niño, vos no podés trabajar en el mismo lugar que vive el niño.

-¿Cómo es la realidad trans?

- Si sos trans es más difícil, es imposible que alquilen departamentos. Además le han pedido el doble de dinero. La realidad es compleja en Rosario, lo que es la comunidad, está desbordada a niveles de emergencia muy grandes en todos los aspectos. Por donde vayas las pibas tienen un estado de vulnerabilidad super extremo, por eso nuestro lema es que : ”trabajo sexual es trabajo pero nunca debe ser destino”.

La mayoría de las compañeras trans son expulsadas de las casas y la primera opción que tienen o que desarrollan es el trabajo sexual, porque el cupo laboral no funciona y está muy parado, es muy difícil que accedan a otros laburos. Se presentan a entrevistas y por cuestiones estéticas no las toman.

Además es una población sumamente atravesada por la cuestión de las adicciones, por el consumo problemático, por la falta de educación etc. Entonces la comunidad trans tiene una dificultad muy particular, aun así hay compañeras que han decidido trabajar y lo sostienen como un modo de vida.

El conflicto que tienen es con el consumo y en relación a la violencia no es con el cliente sino con la policia y lo que se genera alrededor.
 




-¿Son violentadas en el ámbito del trabajo sexual?

-Yo jamás fui violentada por un cliente, hubo situaciones que a mi no me gustaron, se lo podés decir o no lo atendes más. Al límite lo pone uno y ahí es donde hace la diferencia el empoderamiento, porque pueden ser $500 menos pero no importa, no te comes el garron.

¿En ese sentido podés elegir a quién atendes?

Sí, siempre, cuando arranque era un kamikaze total. Ahora como vamos mejorando los niveles de cuidado, yo en ese momento jamás me hubiera permitido pedirle una foto al cliente.

Ahora sí, primero que me mande una foto asi lo reconozco cuando viene, y sino no viene. Igualmente yo actualmente no estoy pidiendo foto porque no tengo muchos clientes nuevos, sostengo los mismos. Pero si tengo uno nuevo tengo el recaudo que haya una compañera presente, aunque siempre hay un margen de riesgo porque es un laburo que pones el cuerpo y no sabes con que te puede salir el otro.

Eso es así, yo siempre digo que el trabajo sexual es trabajo, somos laburantes pero sabemos que tiene un montón de particularidades relacionadas con trabajar muy directamente con un otro, y con el ámbito de la sexualidad que es muy complejo.

-¿Cómo ve la sociedad al trabajo sexual?

-Que se yo, la verdad es que a veces vivo en una burbuja, estoy con mis compañeras y todas tenemos muy claro todo. Pero estoy en otros lugares y escucho hablar y las putas somos siempre el insulto, somos siempre las que hacemos el trabajo sucio. ¿Por qué trabajar con la sexualidad o atravesada por el deseo es peor o más cuestionable que otra actividad?

Por ejemplo un enfermera/o trabaja con la corporalidad del otro, a una persona imposibilitada la toca toda, entonces, ¿qué es lo sucio?, el deseo.

Es que yo estoy trabajando con el deseo. El rollo es que de mi sexualidad hago un negocio, y ¿por qué no? Si mi sexulidad no es que oh ahora su sexualidad es un negocio, por ende mi subjetividad ha sido extirpada. Pero mi sexualidad tiene veinte carriles distintos, con mi cliente yo tengo una sexualidad que está atravesada por el dinero.

-¿Cómo trabajas en la actualidad?

-Actualmente estoy con el fetichismo y BDSM (prácticas sadomasoquistas), cuando laburas lo que es convencional es más aburrido. Hago dominación, en mi caso ejerzo el rol dominante, o sea son prácticas no tradicionales. Muchas veces no tengo sexo convencional con el cliente, oral o vaginal, que es lo que ofrecen mis otras compañeras. La trabajadora sexual nunca cede el control y menos si está empoderada.

¿Que busca el cliente con vos?

La persona que viene a una sesión conmigo busca eso, busca que no se lo juzgue por el fetiche que tenga, por el deseo que tenga. Es un espacio de intimidad en el que la persona se siente segura, para decir y hacer lo que tenga ganas. Es como el analista, pero en versión sexual.

-¿Qué hacés con tus sentimientos a la hora de atender al cliente?

-Tengo un criterio personal, hay compañeras que lo perciben distinto, separan una banda. Yo por eso he dejado de trabajar en el ámbito tradicional, a mi me atraviesa mucho el contacto con el otro. Entonces he aprendido que puedo ejercer el trabajo sexual pero en tales condiciones, con tales servicios. Hay cosas que yo no hago, y ahí para mí es fundamental tener otra entrada de dinero distinta, porque una cosa es estar diez horas metido en un lugar, que tres horas, por ejemplo si laburas en un privado, te quema la cabeza.

- ¿Cuales son los precios que manejan en Rosario?

-El tema de los precios se mueve mucho. Me parece un dato innecesario, porque a ningún otro trabajador se le pregunta cuánto cobra por su trabajo en específico, de hecho la nota de La Capital, son precios que dijeron por decir y lo publicaron tal cual.

Lo que sí es fundamental entender que los precios se sostienen si las compañeras están en comunicación y organizadas. Sino siempre hay una situación de vulnerabilidad en la que en ese negociar en la calle, se empieza a bajar el precio y la persona por desesperación termina haciendo un laburo por dos mangos.

Hay compañeras que trabajan por hora o por media hora, otras trabajan sin reloj, pero con una tarifa más alta. Eso lo decide cada una.

- En cuanto al tema salud ¿Tienen obra social?

La que tiene obra social, es porque es desde otro lado. Hay algunas compañeras que ahora están logrando avivarse y hacer un monotributo de cualquier otro tipo de actividad para poder tener una cobertura. Muchas tienen falta de conocimiento de lo que son los cuidados y es muy delicado.

A veces piden servicios orales sin preservativo y le dicen” te pago un poco más” y bueno aceptan, están en una situación muy vulnerable. El tema de la educación sexual es siempre lo mismo. La mayoría de las compañeras tienen mucho cuidado, conocen que se tienen que cuidar.

Viene de un estigma, donde siempre la legislación de la prostitución se hizo en relación a la cuestión de higiene y salud. Un tema de regulación por el tema de enfermedades de transmisión sexual, como si la trabajador sexual fuera la transmisora. Además con la organización (FUERTSA) hacemos laburo de concientización, y por eso llevamos preservativos.

-¿Como la reciben en los hospitales?

-En general hay poca sensibilidad de parte de los profesionales de la salud, por eso vamos a hacer campaña de concientización para que cuando vayas, no te digan: “ah sos trabajadora sexual, vamos a hacer VIH”, es super pesado decirlo.

El otro día me fui a hacer una ecografía y me preguntaron de qué trabajaba, y me quedé en silencio y le dije “docente”, cuando me encantaría decir que soy trabajadora sexual.

-¿Cuales son las causas por las que se ejercen y se deja el trabajo sexual?

-Hay compañeras que quieren dejar de trabajar porque es un ámbito que es peligroso para ellas ,por ejemplo las trans tienen conflictos con el consumo problemático y necesitan dejar de trabajar para tratarse.

Algunas expresan su voluntad de querer trabajar en otra cosa y otras han trabajado toda una vida y no tienen otra actividad, la mayoría tiene otra actividad.

-¿ Qué rol toma la policía?

Hasta el último tiempo no estaba interfiriendo en nada, no estaban apretando a las compañeras prácticamente. Igual siempre están queriendo sacarlas , pero no estaban llevándolas en cana ni nada. Tuvimos en la zona de pasco una situación de alarma cuando empezaron a joderlas por el tema de las drogas de que si estaban vendiendo o estaban buscando a alguien que estaba vendiendo. Además a las chicas trans la tratan de masculinos y las manosean, los abusos de siempre. Despues ibamos a hacer un corpus colectivo para protegerlas que no las puedan tocar, ni llevarlas presas.

En departamento privados no tenemos compañeras que actualmente estén dejando comisión. Lógicamente uno puede prever cómo funcionan todas las cosas ilegales, como son arreglos,etc.

Igual he recibido un par de llamadas de aprietes, antes del 2 de junio que es el día de la trabajadora sexual. Luego el día del festival había un “cana” encubierto sacando fotos, que es lo que suele pasar. Teníamos carteles bastantes directos a la policía.

La policía usa el miedo sobre las compañeras para obtener una colaboración, están expuestas en la calle y les dicen que ellos las van a cuidar.






-En relación a la trabajadora de calle. ¿Cuáles son las zonas donde trabajan?

-Se van moviendo. Mitre y pasco, por 3 de Febrero, la zona de la terminal (Santa Fe y Castellanos) ahí están las dominicanas y alrededor. También por zona oeste, calle Godoy.

Estamos viendo de salir con otra organización que se llama Vox (Asociación Civil, prevención de VIH) y hacer una recorrida. Queremos anotarlas en el plan “Hacemos futuro” para la que quiera realizar una capacitación o terminar la escuela, pueda hacerlo. Por ello reciben una pensión de $5.000 aproximadamente. También un proyecto de huerta comunitaria.

¿Qué proyecto tienen con Fuertsa?

En principio estamos tratando de sacar la personería jurídica,pero lo que más nos urge es hacer un proyecto para las compañeras trans que tenga que ver con una salida laboral alternativa o algún acompañamiento con relación a eso. También ir gestionando con el estado que las herramientas que hay realmente funcionen, que el Estado trabaje con nuestra organización en conjunto.

Estamos pensando en un proyecto de huerta comunitaria con el INTI (Red nacional de innovación, soporte a la calidad y desarrollo tecnológico para la industria), pero lo que queremos es que la Municipalidad de Rosario nos facilite un terreno.

Estamos en una etapa de recolección de datos, si terminaron el colegio, si tienen familia, si tiene HIV, si se tratan o no. Queremos que nos tomen como una organización sobre la temática, para poder seguir trabajando y a la vez nos brinden ayuda económica.

Por otro lado hacer la “reparación histórica” para las compañeras que trabajaron durante las épocas que estábamos en la vía pública, hasta que mataron a Sandra Cabrera, en ese tiempo las compañeras eran llevadas en cana. Entonces queremos ingresarlas en lo que es la reparación, como se hizo en Buenos Aires para que el Estado reconozca que hubo persecución específica a las trabajadoras sexuales por eso mismo, de ese modo lograríamos que muchas compañeras puedan acceder a algún tipo de pensión.

-¿Hay alguna otra organización?

-No somos nosotros nada más. El tema es que lo que pasó acá en Rosario, cuando cerraron wiskerías y demás. Se pensó que se terminó con la problemática de la prostitución en la Rosario, pero la metieron bajo la alfombra nada más y generó lo que pasa ahora , un territorio con compañeras vulneradas.

- ¿Y con respecto a la trata?

-La condición de trata es más compleja de lo que uno piensa, son un montón de condiciones que suman a que vos estés en condición de trata y a lo mejor ni sepas. Después otras compañeras que sí que entran en una rosca de deudas, que ahí generan un vínculo de explotación.

Acá se está planteando una ampliación de derechos y no de los modelos regulacionistas que como en Europa han fracasado.

-¿Con respecto a la postura abolicionista?

-La postura abolicionista es un delirio teórico y nada más, lamentablemente a mí me encantaría abolir todo tipo de trabajo, incluso el mío. Pero la realidad es que el trabajo sexual existe, o favorecemos que las “putas “se organicen o con tal de que mi teoría triunfe mantengo las cosas como están.

Por otro lado la persona que tiene esa postura ya la tiene y difícilmente comprenda en realidad es obstaculizar la organización de otra trabajadora. ya partiendo de esa base no se puede discutir, si no nos consideran trabajadoras igual que ellas.

Nos ha pasado en las multisectoriales cuando íbamos a introducir las demandas y documentos que hubo una resistencia de que pongamos derechos laborales, nosotros nos presentamos como quienes somos.

-¿Con qué entidades de Rosario tienen contacto?

-Estamos teniendo vínculo bastante estrecho con la oficina de Diversidad de la municipalidad y de la provincia. También junto con “La estación” (Abordaje integral de consumos) , que es el organismo que se ocupa de los consumos problemáticos ( alcohol y sustancias psicoactivas) o el programa Andrés ( acompañamiento y protección), que tiene un subsidios y trabajamos en conjunto.

Estamos haciendo capacitaciones de RCP, manejo de crisis subjetivas, junto a las entidades. Esos son nuestros objetivos, este año está concluyendo así, va a ser muy lento todo esto.

-¿Qué relación tienen con AMMAR?

-Con AMMAR tenemos buena relación, ellos llevan la bandera de lo que es la ampliación de derechos entorno a las trabajadoras sexuales y aparte ellos tienen muchísimo recorrido como organización. Entonces, nos facilitan muchísima información, capacitaciones, maneras que ellos han resuelto cosas que a nosotros nos sirven. lo que se hace acá es consultar con AMMAR pero la forma de hacerlo y resolver las cosas son nuestras.

-¿Qué pensas de la estigmatización social a futuro?

- Es el gran sueño de que “puta” deje de ser insulto; ya dimos un paso enorme que es poder compartirlo con el entorno cercano, familiares o amigos. Además te permite construirte muy desde otro lugar





Elena Moncada activista abolicionista en Santa Fe


Testimonio de ex prostituta-víctima de trata. Presentación del libro “Yo elijo”


Fui seducida enamorada, estuve en situación de prostitución durante 18 años, y empecé mal. Creo que todos sabemos lo que es un fiolo (proxeneta) y entonces ahí se me vino a la cabeza lo que es la trata. Es exactamente lo mismo, seduce y te enamora, que también es el secuestro, que no deja de ser menos violento que el anterior.

Algunas mujeres que no tienen la posibilidad de estudiar como yo, otras que sí, y la salida inmediata fue el mundo de la prostitución y no podíamos vernos ni como víctimas ni como sobrevivientes del sistema prostituyente. Yo hoy soy una sobreviviente.

En ese momento empezamos a naturalizar que era todo normal, hasta que comenzamos a pensarnos hay muchas Elenas que están teniendo voz, que durante muchos años estuvimos anestesiadas y dormidas sin darnos cuenta que estábamos sufriendo violaciones sistemáticas paradas es una esquina. Cuando estábamos en cualquier lugar que hoy se dice que se están cerrando los prostíbulos y bueno eso es verdad y es mentira, las dos a la vez. Porque se camuflan y funcionan desde otro lugar.

Yo viajo mucho al norte santafesino, donde la trata empezó a moverse de otra manera porque los proxenetas están muy adelantados. Cuando nosotras tratamos de cerrar un prostíbulo acá en Rosario por ejemplo, ellos ya tienen otro en Coronda para abrir. Lamentablemente estuve acompañando desde el primer día de la desaparición de Rosalia Jara , esa niña prostituida en un ranchito que lo fui a conocer, de ahí fue secuestrada y muerta por supuestamente el profesor que además tiene una niña con él.

Hace 27-30 años atrás que empezaron a llevar a las plazas (casas de trabajo) que en San Nicolás, que voy a ir dentro de poco. Paso por la misma casa donde yo estuve 15 días secuestrada con otras compañeras, que a veces me preguntan ¿y la vida de chica secuestrada? porque yo no era la secuestrada, según yo porque uno se plantea si estuve secuestrada 18 años y el Estado me dejó tirada porque nadie se hizo cargo de mi. Ya de mis 8 años cuando mi madre muere, la docente nunca me fue a buscar para ir al colegio.

Lo digo porque mi ya no me preocupa, estoy escribiendo el segundo libro, dando muchas charlas en todo el país, me siento capacitada para hacer otras cosas. No necesito terminar los escuela.

Pero sigo recorriendo el país y me encuentro con las mismas realidades, las niñas que están como trapitos en la calle, son futuras prostitutas porque no estudian y están controladas por su mamá para que les den dinero.

Volviendo al caso de Rosalía Jara, ahí los medios tienen cero perspectiva de género, lo primero que hacen es decir se fue con el novio, tiene 5 piercings, está toda tatuada, usaba pollera corta. Son cosas que tienen que ver con las percepciones y elecciones de cada una de nosotras por eso o les damos derecho a nadie a matarnos no a violarnos.

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